Una vez que tu recipiente de siembra tiene la cantidad de tierra suficiente, casi totalmente lleno (1 cm del borde superior), abres un hoyo con tu dedo índice. De tal manera que la plántula entre en ese hoyo cubriéndolo y presionando levemente para que se integre con la tierra que has alistado previamente. Posterior puedes poner el fertilizante (abono orgánico de lombriz)